SOBRE LAS CIENCIAS DE LA EDUCACION



La ciencia se nos aparece como la más deslumbrante y asombrosa de las estrellas de la cultura cuando la consideramos como un bien en sí misma, esto es como una actividad productora de nuevas ideas (investigación científica). (Bunge, 1959, pág. 6)


Por: Héctor Rolando Santana

La ciencia, dado que trata de estudiar y dar conclusiones partiendo de lo que en sí es considerado objetivo, constituye un marco de referencia para aquellas áreas del conocimiento que intentan validarse a sí mismas.

Pues el principio Cartesiano de obtener una verdad que no sea objeto de contradicción, más que un interés por negarse para luego definirse, se tergiversa, concluyendo en la negación de sí misma, no para descubriese como tal, sino para descubrirse como otro ya constituido, y sobre todo definido.

Este fenómeno ha pasado en diversas áreas del saber; como la Educación, nominada a sí misma como ciencia. Esta en vez de contribuir a que la ciencia pueda tener los mecanismos para lograr expandirla, intentan convertir a la educación como ciencia. Perdiendo su razón de ser. Pues la educación más que una ciencia en sí misma, es un aval para las ciencias, constituyéndose en mecanismo de propiciación de conocimiento, no conocimiento en sí misma.

De manera que, la particularización de la educación, niega la educación misma. Pues, la educación, debe ser vista como el proceso que facilita el aprendizaje independientemente del área del saber. De modo que su función es transversal, no vertical ni horizontal.

De ser transversal dista la Educación Dominicana. De manera que deja de ser totalizadora, de transformar conocimiento en comportamiento, y sobre todo no incentiva, ni mucho menos vincula el arte de descubrir el mundo de distintos tipos de conocimientos.

Pero ¿Cuál es el problema?

El problema está en que se sacan las ciencias de su base, y también se denigra la educación a una simple repetición de conocimientos que no les son propios, sino que le pertenecen a otras áreas del saber. No termina siendo ni ciencia ni educación.


La educación y sus menciones

Esta indefinición de la educación se ve -no solo- en la cientificidad inexistente del concepto, sino en el traslado del quehacer educativo.  De modo que, existe una constante ineficiencia de quienes en algún momento queriendo actuar con rigor científico contienen en sí mismo problemas básicos de formación.

Muestra de esta deficiencia son las presentadas en las áreas de educación mención Inicial, básica, Media, por no mencionar más; quienes al tratar de manejarse dentro del mundo académico, carecen de las competencias necesarias de un académico; constituyéndose solo en repetidores de información y gestores de conocimiento. Al afincamiento de esta carencia aportan las instituciones encargadas de velar por estos. Pues marcan su finalidad en el cumplimiento de metas medibles en indicadores no comprobables y mucho menos alcanzables. Es decir, se enseña con la prisa de cumplir con el tiempo y lo establecido en programas, nada más.

Es decir, se presenta una notable carencia de producción literaria, poco aporte al debate educativo, más allá de motivar con palabras la inserción en su área de desempeño, y sobre soto una desactualización conforme al personal a educar y las nuevas tendencia; pues, hoy tenemos los métodos de décadas atrás.

De modo que, la educación debe buscar crearse a sí misma, y actualizarse conforme a los avances y las nuevas circunstancias para poder de este modo, procurar que el alumno aprenda a crearse a sí mismo, constituirse en verdadero ser moral, racional y sobre todo libre. Ya afirmaba John Dewey que “el esfuerzo creador debe realizar por las actividades educativas… pues su aceleración depende de los hombres que se esfuerzan conscientemente por educar a sus sucesores, no para el estado de cosas existentes, sino para hacer posible una humanidad futura mejor”. (Dewey, 1998, pág. 11)

Trabajos citados

Bunge, M. (1959). La ciencia, su método y su filosofía. Recuperado el 24 de Noviembre de 2016, de https://users.dcc.uchile.cl/~cgutierr/cursos/INV/bunge_ciencia.pdf
Dewey, J. (1998). Democracia y educación: una introducción a la filosofía de la educación. Obtenido de http://www.terras.edu.ar/biblioteca/8/SOCE_Dewey_Unidad_6.pdf

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